Antes de iniciar una clase, es importante definir el tipo de ambiente con el que se va a trabajar. Esto va a afectar la forma en la los estudiantes aprendan. Ten siempre en cuenta que nos gusta incentivar la mentalidad de aprender de nuestros errores.

Entender que la tecnología falla y que eso es parte del proceso de aprendizaje es crítico durante las clases. Debemos fomentar la exploración, prueba y error y solución de problemas de manera colaborativa.

Aprender a programar es como aprender un nuevo idioma y eso nos toma tiempo, paciencia y mucha práctica.

Antes de iniciar un taller, tengamos en cuenta

La tecnología falla. Si la computadora con la que trabaja un estudiante falla constatenmente va a resultar frustrante. Trata de resolver el problema junto al estudiante. Pregúntale qué haría si esto le pasaría en casa. ¿Reiniciarían el programa? ¿Reiniciarían la computadora? ¿Revisarían si la computadora está conectada correctamente? Si el problema persiste, intenta buscando en Google. Es importante enseñarle a usar todos sus recursos y poder ingeniarselas en un futuro.

Aprendizaje basado en solución de problemas. Incentiva a que los estudiantes pidan ayuda a los demás antes de llamarte a ti. Por lo general, los estudiantes son capaces de resolver los problemas y es una buena forma de empoderarlos como líderes. Puedes considerar crear un checklist para resolver problemas con los estudiantes. Y cuando todo falla, no olvides que pueden utilizar Google. Aprender a acceder a la información en internet es una habilidad altamente requerida y les va a servir en el futuro.

Aprendizaje basado en investigación. Tengamos en cuenta de que enseñarles a programar es el punto de inicio. Permitir que los estudiantes propongan ideas y se resuelvan sus dudas es un paso muy importante en su proceso de aprendizaje.